Los colombianos tienen una relación, en general, de apatía o poco interés por el cine que se hace en Colombia. Rara vez las películas locales alcanzan un éxito de taquilla y las taquilleras rara vez un interés entre la crítica.

El cine del paisa Víctor Gaviria es una excepción. Director de los largometrajes Rodrigo D. No futuro (1990), La Vendedora de Rosas (1998), Sumas y Restas (2004) y La Mujer del Animal (2016), Gaviria ha logrado que sus películas sigan teniendo relevancia como piezas de cine social. A veces, más que las tramas o sus personajes, las partes de su cine que más se recuerdan y comentan son las frases de sus actores naturales. Como descubrimientos de una lengua dentro de la lengua, Víctor Gaviria le ha logrado poner el oído a cómo hablan los jóvenes y niños de sectores excluidos en Colombia.

La Silla Vacía entrevistó al director Víctor Gaviria para hablar sobre el lenguaje que encontró en sus películas y lo que este refleja acerca la exclusión. Para profundizar el tema también habló con Carlos Fernando Álvarado, Profesor del Programa de Comunicación Social y Periodismo de la Universidad de Manizales.

Para conocer más sobre Victor Gaviria pueden ver este episodio del podcast Encuentros, de MUBI, en el que el director habla con Fernando Trueba, el cineasta español.

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Soy editor de la Silla Académica y cubro las movidas del poder alrededor del medioambiente en la Silla.

Soy periodista audiovisual de La Silla Vacía, en donde realizo y produzco contenidos para redes sociales, especialmente videos, fotografías, guiones, infografías y documentales. Estudié Periodismo y Opinión Publica junto con Antropología en la Universidad del Rosario, y actualmente hago un diplomado...